El síndrome de Jerusalén es una
enfermedad psíquica que afecta a un turista o un habitante de Jerusalén. La
enfermedad tiene el carácter de una psicosis y se exterioriza con signos de
delirios: el afectado se identifica completamente con un personaje de la
historia sagrada del Antiguo o del Nuevo Testamento y actúa como tal.
Muchos personajes de la Biblia son objeto
de una identificación de este tipo, como por ejemplo Moisés o el rey David del
Antiguo Testamento, o Jesús de Nazaret y Juan el Bautista del Nuevo Testamento.
Habitualmente los hombres emulan personajes masculinos de la Biblia y las
mujeres, personajes femeninos. La confesión religiosa también es importante,
puesto que los judíos imitan a personajes del Antiguo Testamento, y los
cristianos suelen imitar a los del Nuevo. No se han dado apenas casos entre
musulmanes.
La identificación con personajes bíblicos
es completa y suele ir acompañada por prédicas públicas y plegarias con
enfermos. Muchos de los afectados acostumbran a pasearse vestidos con túnicas o
sábanas.
Excelente información te felicito!
ResponderEliminarExcelente información te felicito!
ResponderEliminarMuy buen artículo, no sabia de este síndrome te felicito
ResponderEliminarEn los Simpsons hacen una parodia de este peculiar síndrome...
ResponderEliminarEs interesante la cantidad de patologías que se han desarrollado recientemente
ResponderEliminarYo creo estar en Jerusalem ahora.
ResponderEliminarExcelente información, te felicito
ResponderEliminarPues si, se debe creer en Dios, pero sin fanatismo, por eso algunos les dan esas enfermedades extrañas.
ResponderEliminarPues si, se debe creer en Dios, pero sin fanatismo, por eso algunos les dan esas enfermedades extrañas.
ResponderEliminarLas religiones dan como frutos este tipo de enfermedades extrañas y crean en muchos casos hasta guerras. Que bien sería creer en Dios, pero sin fanatismos.
ResponderEliminarTriste este tipo de enfermedades!
Las religiones dan como frutos este tipo de enfermedades extrañas y crean en muchos casos hasta guerras. Que bien sería creer en Dios, pero sin fanatismos.
ResponderEliminarTriste este tipo de enfermedades!
No tenia idea de eso.
ResponderEliminarinteresante
Muy buena información!, Te felicito
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